Digestiones Perfectas
Terribles. Tenemos las digestiones terribles.
Gases, hinchazón, distensión abdominal, diarrea/estreñimiento, digestiones lentas y pesadas, reflujo, intolerancias, alimentos que repiten… imagino que te sonará todo esto.
Hemos normalizado estos síntomas y lo vemos «normal».
Normal no es lo mismo que común. Digerir mal es común pero no normal. Lo normal es digerir bien (aunque no pasa nada que en un momento puntual tengas alguna alteración).


Una de las cosas que mejor se me da es revertir la intolerancia a la lactosa que por cierto, no es irreversible. He revertido muchísimas ya.
¿Sabías que el 70-80% del sistema inmune tiene relación directa con el intestino?
El intestino es la puerta de entrada a casa y por el que entran las herramientas que nuestro cuerpo necesita pero también por la puerta que entran los invasores.
Hay una cosa que se llama permeabilidad intestinal. En castellano, tienes huecos para que parásitos, bichos y otra serie de cosas entren en casa. Normal, está la puerta abierta y lo raro será que no haya alguien viendo la TV en tu sofá.
Esto es mucho más normal de lo que se cree. Y si hablamos de sobrecrecimientos de microorganismos ya… ¿o es que los gases, hinchazón, diarreas/estreñimiento son mala suerte o casualidad?
Si subimos al estómago más de lo mismo, no prestamos suficiente atención a cuidarlo y normalizamos cosas que no lo son.
¿Entramos en la boca? Aquí ya sí que nos tiramos hasta mañana. Ésta si que la cuidamos mal y mira que tiene facilito enfermar. De hecho, muchas patologías vienen por alteración en la microbiota bucal. Por supuesto, de la intestinal también.
¿Sabías que los primeros bichitos que tienen los bebés son los que tiene la madre en la boca?
Cuida BIEN tus «bichos» y los órganos de tu tubo digestivo. ¡Estás a un solo CLICK DE CONSEGUIRLO!